En el programa “Tardear”, varios testigos y la reportera del programa han aportado detalles sobre lo que podría ser la nueva ilusión de Irene Rosales, exmujer de Kiko Rivera, apenas semanas después de confirmarse su separación.

Aunque tanto Kiko como Irene han insistido en que no ha habido terceras personas en la ruptura, las cámaras del programa han recogido testimonios que apuntan a la aparición de un hombre en la vida de Irene.

Los testigos coinciden en que se trata de un pastelero, al que describen como un hombre de unos 40 años, alto, moreno, con barba y “muy atractivo”. Según sus declaraciones, la pareja habría sido vista en varias ocasiones, caminando juntos “con complicidad” y mostrándose gestos de cercanía:

“Iban muy pegaditos, a 20 centímetros el uno del otro. Cuando llegaron al coche, él le puso la mano en la espalda de forma muy suave”, relataba una de las personas que asegura haberlos visto.

La reportera de ‘Tardear’ habla con la supuesta ilusión de Irene Rosales

La reportera del programa se desplazó hasta Coria del Río, donde se encuentra la pastelería favorita de Irene, a tan solo 20 kilómetros de Castilleja de la Cuesta, localidad en la que reside. Allí pudo hablar con el presunto protagonista de la historia.


Al ser preguntado, el pastelero negó en un primer momento conocer a Irene Rosales, refiriéndose a ella como “esa muchacha”. Sin embargo, en posteriores conversaciones se mostró más nervioso, entre risas y explicaciones, lo que levantó aún más sospechas en el programa.


“Cuantas más excusas daba, más dudas generaba. Como dice el dicho: excusatio non petita, accusatio manifesta”, señaló la reportera.


Aunque por ahora no hay confirmación oficial, en el programa apuntan a que este hombre, podría ser quien devuelva la sonrisa a Irene Rosales tras su inesperado divorcio. La incógnita sobre si este pastelero es solo un buen amigo o algo más sigue abierta.